11 de septiembre de 2012

Es bien sabido por muchos, Latino América se ha convertido en un nicho de infinito alimento para los delincuentes, en nuestro continente (O la parte baja después de U.S.A), los llamados ladrones, mareros, malandros, cholos, lanzas, etc. Tienen rienda suelta para hacer y experimentar toda clase de fechorías, en este mini articulo contaré una experiencia personal y las medidas que recomiendo tomar para evitar estos molestos sucesos.

Todo empezó un precioso día, en la semana anterior, me disponía a tomar mi hora de almuerzo en mi lugar de explotación (mejor conocido como práctica), cuando me disponía a degustar mi almuerzo recibí una llamada extraña, como soy algo flojo y no me gusta guardar los números, pensé que era algún amigo o conocido tratando de localizarme, el dialogo se desarrollo de la siguiente manera:

Yo: -Hola
Extraño: -Hola, estamos llamando al numero <nombraron mi numero>
Yo: -Lógicamente ese es mi número
Extraño: -Fíjese que hay una situación delicada, no cometa el error de colgarnos, con quien hablo.

Nota: yo hasta ese punto no sospechaba nada, me imagine que era alguna emergencia de mi familia o algo por el estilo.

Yo: - Bueno dígame, ¿que pasa? ¿que necesita?
Extraño: -Le hablamos de la mara MS (Mara Salvatrucha, son una pandilla muy grande que esta en toda Centroamérica, una de las mas agresivas), estamos a una cuadra de su casa, no queremos hacerle daño a su familia ni a usted.

En ese punto colgué el teléfono, quedé algo consternado, era la primera vez que me pasaba algo así, después de vivir aproximadamente 8 años en este precioso país, llamé a mis padres para alertarlos por cualquier cosa, se alarmaron y hasta pensaron en abandonar el país.

Luego de que la conmoción se detuvo y pude reflexionar de todo lo que había pasado, me di cuenta que era simplemente algo de rutina, ya que no habían mencionado ningún dato aproximado de mi persona ni mi ubicación.

Después de eso escuche varios testimonios de sucesos parecidos departe de mis compañeros de trabajo, creo que reaccioné bien ante ese intento muy pobre de extorsión, pero aprendí una lección de las cosas que hay que evitar:

-Nunca dar datos personales en encuestas o cuestionarios
-Responder a la típica e inoportuna pregunta de "Con quien hablo?" con "Dígame quien es usted y que quiere?"
- Ser cortante con algún numero equivocado, no dar mas datos.
- Si la llamada es de algún aviso sobre algún familiar capturado o herido, tratar de verificar su estado lo mas rápido posible
- Conservar la calma, cuando alguien quiere hacer algo lo hace, no avisa.
-No publicar ubicaciones en las redes sociales, no publicar fotos de lugares actuales, subir las fotos de vacaciones después de haber regresado a casa.

Estas son algunas medidas que se pueden tomar, yo pensé que jamás me tocaría algo así y sucedió de pronto, hay que estar alertados.

Estas son grabaciones de llamadas de extorsionadores, sacada de este util blog http://hack.interactivahn.com


Segunda parte:





2 comentarios:

Danny Boy dijo...

Y ese es el día a día en Honduras. A esas llamadas de extorsionadores no hay que pararles bola. Durante estuvo trabajando mi hermana para una de las compañías de telefonía celular del país recibí una de esas llamadas de extorsión, le dí a mi hermana el número del que me marcaron y ella pudo corroborar que el idividuo detrás de ese teléfono marcó números "al azar", por decir algo de la siguiente manera:

9936-2554
9936-2555
9936-2556
9936-2557...

Y así sucesivamente hasta que un incauto cae. Como dije al principio, no es de pararles bola, ya que son gente que está a cientos de kilómetros de donde dicen estar y alguan gente ha logrado averguar que las llamadas muchas veces salen del presidio de SPS.

Unknown dijo...

Lo sé amigo, solo que me impresioné por ser primera vez :c

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